terapia cognitivo conductual para la depresion

Qué es la terapia cognitivo conductual para la depresión y cómo puede ayudarte

Según los resultados del metaanálisis llevado a cabo por el grupo de P. Cuijpers y sus colegas, el cual se ha publicado recientemente en World Psychiatry, se ha podido determinar que esta es una de las conclusiones más significativas.

Lo que puedes esperar

¿Qué es la terapia cognitiva conductual?

La terapia cognitiva conductual, también conocida como TCC, es una técnica de tratamiento psicológico que se puede realizar de forma individual o en grupo con familiares o personas que sufran problemas similares. Además de la tradicional terapia presencial, existen recursos en línea que facilitan la participación en la TCC, especialmente en áreas con escasos recursos sanitarios.

Primera sesión de TCC

Durante la primera sesión, el terapeuta recopila información sobre ti y te pregunta qué áreas de tu vida te gustaría trabajar. También analiza tu estado físico y emocional actual y pasado para tener una comprensión más profunda de tu situación. Es posible que el terapeuta evalúe si podrías beneficiarte de otro tipo de tratamiento, como medicamentos.

Entrevista al terapeuta

La primera sesión también es una oportunidad para que tú entrevistes al terapeuta y te asegures de que sea la persona adecuada para ti. Es importante que entiendas:

  • las habilidades y el enfoque terapéutico del terapeuta
  • los objetivos de la TCC y cómo se abordarán en las sesiones
  • la duración y frecuencia del tratamiento

Estos son aspectos importantes a tener en cuenta para asegurarte de que la TCC sea beneficiosa para ti.

Controlando la ansiedad y la depresión a través de la Terapia Cognitiva Conductual

Los trastornos de ansiedad y depresión se encuentran en aumento y son una de las principales preocupaciones en la actualidad. Especialmente, debido a la difícil situación económica, su prevalencia ha aumentado considerablemente. De hecho, se prevé que en 2020 se conviertan en la primera causa de discapacidad a nivel mundial en un corto período de tiempo.



Afortunadamente, la terapia psicológica ha demostrado ser la mejor opción y la más eficiente para combatir estos problemas. A diferencia de los medicamentos, no conlleva ningún riesgo para la salud ni causa efectos secundarios perjudiciales. Incluso, se ha comprobado que la terapia es más efectiva que la medicación en el largo plazo y no solo alivia los síntomas, sino que también aborda las causas subyacentes del problema.



Es importante destacar que la terapia psicológica no solo es una opción efectiva para tratar la ansiedad y la depresión, sino que también puede ser beneficioso para prevenir su aparición y mejorar la calidad de vida en general. Además, el enfoque holístico de la terapia permite abordar las diferentes dimensiones del bienestar, incluyendo la salud mental, emocional y social.



No hay razón para sufrir en silencio o confiar únicamente en la medicación, ya que la terapia ofrece una alternativa segura y comprobada para mejorar la salud mental y emocional a largo plazo.

Beneficios de la psicoterapia cognitivoconductual

Este tratamiento ofrece beneficios muy positivos en comparación con la administración de fármacos. De hecho, tiene una mayor adherencia al tratamiento, lo que lo convierte en una opción recomendada por el National Institute for Health and Clinical Excellence (NICE), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Federación Mundial de la Salud Mental (WFMH).

La terapia cognitivo conductual (TCC) es considerada como el tratamiento de primera elección por estas organizaciones para trastornos como el depresivo leve y moderado, el de angustia, el obsesivo-compulsivo, el de ansiedad y las fobias específicas.

Además de las recomendaciones mencionadas, la TCC también ofrece ventajas en el tratamiento de problemas de salud mental en pacientes que presentan complicaciones médicas, como el abuso de alcohol o drogas. A diferencia de la prescripción de fármacos, la TCC no crea dependencia a químicos, lo que la hace una opción más favorable.

También es importante destacar que la TCC es recomendada para el tratamiento de trastornos en niños, adolescentes y mujeres embarazadas, lo que demuestra su eficacia y seguridad en diferentes etapas de la vida.

Abordando la depresión El papel del psicólogo en el tratamiento

El Sr. Rodrigo ingresa a mi consulta de psicología. Me comenta que desde hace cierto tiempo ha perdido las ganas de vivir. Está triste y sin motivación, no encuentra nada que le otorgue un mínimo de alegría. Incluso actividades que antes le entusiasmaban, ahora son un estorbo. Además, no ve ninguna esperanza en relación a su situación actual. Se ha planteado ser una carga para sus seres queridos.Al principio, recibía apoyo de ellos, pero con el tiempo acabaron cansándose y ahora se siente solo. Según los resultados de diversas evaluaciones, parece que estamos frente a un trastorno depresivo mayor. Sin embargo, ahora debo preguntarme, ¿qué puedo hacer como profesional para ayudarle a mejorar su situación?

Técnicas cognitivas

El uso de técnicas en el tratamiento de la depresión

Existen diversas técnicas que son aplicadas en el ámbito de la depresión con el fin de identificar y reemplazar las cogniciones disfuncionales por otras más adaptativas. Algunas de las técnicas cognitivas más comúnmente utilizadas son las siguientes:



Autorregistro de pensamientos negativos

Este método se basa en que el paciente lleve un registro diario de sus pensamientos negativos, identificando la distorsión cometida y al menos una interpretación alternativa. Con el tiempo, esta herramienta puede evolucionar a tablas más complejas.



Indagación en las creencias profundas

En este caso, se busca ahondar cada vez más en las creencias del paciente, revelando así aquellas que son la raíz de sus pensamientos negativos. Se parte de una afirmación o pensamiento inicial, para luego analizar qué lo causa, por qué se piensa de esa manera, y así sucesivamente, en busca de un significado cada vez más personal y profundo.

Por qué se realiza

La terapia cognitiva conductual es ampliamente empleada en la resolución de diversos problemas y suele ser la preferida en el ámbito de la psicoterapia debido a su eficacia en la identificación y afrontamiento de desafíos específicos. Además, se caracteriza por requerir menos sesiones que otros tipos de terapia y por ser muy estructurada.

Tratando la depresión

Existen múltiples enfoques que buscan explicar la depresión y sus raíces. Esta amplia variedad es positiva, ya que nos ofrece una amplia gama de métodos para tratarla. Uno de los más populares y exitosos en la actualidad es la Terapia Cognitiva de Beck.

Esta teoría se centra en los aspectos cognitivos como principales causantes de la depresión. Según ella, el problema principal de las personas con depresión es su tendencia a distorsionar la realidad debido a patrones de pensamiento arraigados en su mente. Estos patrones, llamados esquemas cognitivos, nos llevan a tener pensamientos negativos sobre nosotros mismos, el futuro y el mundo que nos rodea (conocido como tríada cognitiva).

Basándose en esta teoría, el propio Beck creó la Terapia Cognitiva con el objetivo de tratar la depresión (aunque posteriormente se ha adaptado para otros trastornos).

La intervención cognitiva de Beck para tratar la depresión

Esta terapia busca ayudar a los pacientes a encontrar una perspectiva más positiva de la realidad, alejándolos de los patrones de pensamiento negativos y las distorsiones cognitivas típicas de la depresión.

El enfoque es el de una colaboración empírica, donde el paciente tiene un papel activo en la creación de situaciones que le permiten poner a prueba sus creencias. Estas situaciones son propuestas tanto por el terapeuta como por el paciente. Además, el psicólogo no confronta directamente las creencias disfuncionales, sino que crea un espacio de reflexión para que el paciente mismo se dé cuenta de la inexactitud de sus creencias. Este método es conocido como "método socrático".

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