El termo eléctrico ventajas de enchufar y desenchufar todos los días
.
En el presente artículo, daremos respuesta a una interrogante muy común en busca de reducir gastos en el consumo de energía. La cuestión es: ¿es más conveniente mantener el termo eléctrico siempre activo o programarlo? A continuación, se detalla la respuesta.
Establece el termómetro a la medida correcta
Es esencial que el termostato de tu termo eléctrico se encuentre en la temperatura adecuada. Si está demasiado baja, el calentamiento del agua tardará más y se desperdiciará una mayor cantidad de agua fría. Por el contrario, una temperatura demasiado alta aumentará el consumo eléctrico sin necesidad. La temperatura recomendada es de 60 grados Celsius.
Optimiza tu uso del termo según el momento del día
El momento en que utilices tu termo eléctrico tendrá un impacto en su consumo de energía.
Dependiendo de cuándo lo uses, podrías estar pagando más por cada kilovatio hora.
Es recomendable tratar de usarlo durante las horas de menor demanda, como en la noche o temprano en la mañana, en lugar de durante las horas pico de alta demanda energética.
El proceso detrás de un calentador de agua eléctrico
La clave para el funcionamiento de un termo se encuentra en su resistencia eléctrica interna, encargada de calentar el agua hasta alcanzar la temperatura deseada que se ajusta en el termostato. Una vez que se alcanza dicha temperatura, la resistencia se apaga, permitiendo que el agua caliente se almacene en el interior del termo para estar disponible cuando sea requerida.
La resistencia solo se activa nuevamente cuando la temperatura del agua desciende, ya sea por haber estado almacenada por un período de tiempo o por ser utilizada. En caso de quedarse sin agua caliente, es necesario esperar un tiempo, que puede ser de entre 1 y 3 horas, para que la resistencia se active nuevamente y caliente el agua a la temperatura deseada.
Optimiza el uso de tu termo eléctrico con estos tips
En tu hogar, después de la calefacción, el consumo de agua caliente sanitaria ocupa el segundo lugar en la lista de consumo energético con un 20% (IDAE). Por lo tanto, es importante ser responsable en su uso para evitar gastos innecesarios en la factura de la luz.
Para asegurar un consumo responsable, es esencial que el termo eléctrico no pierda calor. Estos calentadores de agua funcionan con electricidad y, por lo tanto, se requieren materiales que mantengan la temperatura del agua a niveles altos por más tiempo. De lo contrario, el consumo eléctrico aumentará y perderá su eficiencia y rentabilidad. Por esta razón, es recomendable elegir un modelo de clase energética A, lo que puede ahorrarte hasta un 15% en comparación con los termos eléctricos convencionales.
También es aconsejable instalar el termo en el interior de la casa, preferiblemente en el baño o la cocina. Al minimizar la distancia entre el termo y los puntos de consumo, se reduce la pérdida de calor y se aumenta su eficiencia. De hecho, ¡puedes ahorrar hasta un 30% de energía siguiendo esta simple recomendación!
Instala un temporizador
Reduce tu consumo eléctrico con un temporizador para tu termo
Si estás buscando una forma eficiente de reducir tu consumo eléctrico, un temporizador puede ser la solución perfecta para tu termo. Con esta herramienta, podrás programar el encendido y apagado del termo en las horas en las que verdaderamente lo necesitas.
Imagina poder programar tu termo para que se encienda automáticamente durante la noche y se apague durante el día, cuando no se necesita agua caliente. Esto no solo te ayudará a ahorrar en tu factura de la luz, sino que también contribuirás al cuidado del medio ambiente al reducir tu huella de carbono.
Aprovecha al máximo tu termo con un temporizador
Además de ahorrar en tu consumo eléctrico, un temporizador también te permite optimizar el uso de tu termo. Por ejemplo, puedes programarlo para que se encienda media hora antes de que te levantes para tener agua caliente lista para tu ducha matutina.
También puedes configurarlo para que se apague después de un cierto tiempo, evitando que tu termo se quede encendido innecesariamente. De esta manera, no solo estarás ahorrando en tu factura de electricidad, sino que también estarás prolongando la vida útil de tu termo al reducir su tiempo de funcionamiento.
No lo dudes más y adquiere un temporizador para tu termo hoy mismo
Si aún no tienes un temporizador en tu termo, no esperes más para ahorrar en tu consumo de electricidad y aprovechar al máximo tu termo. Esta sencilla herramienta te permitirá tener una mayor eficiencia energética en tu hogar y contribuir al cuidado del medio ambiente. ¡No esperes más y adquiere tu temporizador hoy mismo!
Minimiza el uso del termo a situaciones indispensables
¡Ten en cuenta! No enciendas el termo a menos que sea imprescindible. Un buen ejemplo es si solo requieres agua caliente para lavar los platos, en ese caso, no es necesario que lo enciendas para bañarte. Además, procura utilizar solo la cantidad necesaria de agua para evitar el desperdicio y el aumento en el consumo de electricidad.
Comprueba si hay corriente eléctrica
Antes de empezar, asegúrate de que el termo eléctrico esté correctamente conectado a la corriente y que no haya habido un apagón eléctrico. Si todo está en orden, comprueba que el interruptor de luz del termo esté activado.
Revisa el termostato
Si tienes un termo eléctrico encendido y el interruptor activado, es probable que tengas un problema con el termostato. Para solucionarlo, asegúrate de que esté en la posición adecuada y ajusta la temperatura a tu preferencia.
Ajusta la temperatura
Reducir el consumo de energía de tu termo eléctrico es más fácil de lo que crees. Una forma muy eficaz es ajustar la temperatura del mismo. Muchos termos están programados a una temperatura muy alta, lo que los hace utilizar más energía de la necesaria. Sin embargo, simplemente modificando la temperatura a unos 60 grados centígrados, puedes ahorrar una gran cantidad de energía en tu hogar.
Además, ajustar la temperatura también tiene beneficios para tu economía. Con una temperatura más baja, no solo estarás protegiendo el medio ambiente al reducir el consumo de energía, sino que también estarás ahorrando dinero en tu factura de electricidad. No necesitas una temperatura excesivamente alta para cubrir tus necesidades domésticas, ya que 60 grados centígrados es más que suficiente para la mayoría de los usos diarios.
De igual forma, debes tener en cuenta que mantener una temperatura demasiado alta en tu termo eléctrico también puede causar desgaste y daño en el equipo a largo plazo. Por lo tanto, ajustar la temperatura a un nivel adecuado es no solo una medida eco-amigable, sino también una forma de proteger tu inversión y prolongar la vida útil del termo.
Ajusta la temperatura a unos 60 grados centígrados y verás cómo ahorras energía y dinero al mismo tiempo que proteges el medio ambiente. ¡Una pequeña acción con grandes beneficios!Conclusión
Es esencial destacar que en diferentes situaciones, los resultados pueden depender significativamente de la calidad del aislamiento del termo, la temperatura ambiente y otras variables difíciles de evaluar.
En el caso en cuestión, se ha llegado a la conclusión de que para periods de tiempo prolongados (más de 17 horas) sin utilizar agua caliente, es recomendable programar el termo para que se apague después de la última ducha y se active de nuevo entre seis y siete horas antes de la primera del día siguiente.
De este modo, se evita un consumo innecesario del termo, el agua se mantiene fría (o menos caliente) en el depósito, sin que se gaste energía eléctrica, y se calienta antes de ser utilizada, evitando así el coste de mantenerla caliente durante las horas en las que no se necesita.
