pueblo bajo el pantano de iznajar

Descubre la fascinante historia del pueblo bajo el pantano de Iznájar

Entre los descubrimientos que emergen con la disminución del nivel del Lago de Andalucía, se encuentran vestigios del Puente Molinillo, así como chimeneas de viejas fábricas, torretas de iluminación y construcciones habitacionales sumergidas bajo el agua.

El impacto transformador de la presa Un punto de inflexión

La construcción del embalse en Iznájar

La construcción del embalse de Iznájar ha supuesto una transformación radical en la vida y el paisaje de esta región. Anteriormente, su núcleo principal era una pequeña península, pero ahora parece emerger entre las aguas, conectada a tierra firme a través de puentes. Sin embargo, no solo el paisaje ha cambiado, sino también su estructura social y económica.

Se ha producido una modificación drástica en el medio físico, en las actividades económicas, en los asentamientos de población y en las infraestructuras. Todo esto ha resultado en un nuevo Iznájar con nuevos problemas por resolver.

La expropiación de tierras y sus consecuencias

El Ayuntamiento recuerda que la construcción del embalse conllevó la expropiación de las mejores tierras cultivables del municipio. Esto provocó el desplazamiento de numerosos vecinos, que fueron trasladados a otras zonas de riego río abajo (Céspedes, Poblado de Maribáñez o Bembézar). Algunas familias optaron por emigrar a regiones del norte de España, como lo hizo Ana Cordón, la constructora de la maqueta referencial.

La gran inauguración del embalse

El pantano fue inaugurado el 3 de junio de 1969 en un gran acontecimiento que dejó impresionado a todos con sus cifras increíbles. Cubrió 3.000 hectáreas, incluyendo 200 hectáreas de tierras de regadío. Además, se inundaron 150.000 olivos y se crearon 65.000 hectáreas de tierras regables. Construir la presa requirió 1,4 millones de metros cúbicos de hormigón, estableciendo un récord para este tipo de obras en España en ese momento.

En otoño las aguas desvelan su pasado

El impresionante embalse de Iznájar se ha convertido en un enorme lago que alberga la mayor central hidráulica de la región andaluza. Además de su importancia en la generación de energía, este lugar es un motor clave en el turismo local gracias a la hermosa playa de Valdearenas, considerada por sus visitantes como una de las mejores playas interiores, y a la Estación Náutica Lago de Andalucía, ideal para la práctica de deportes acuáticos.

Cada año, el pantano atrae a más de 16.000 personas que acuden para disfrutar de un paseo, un refrescante baño o un momento de descanso en su área recreativa. Según nos informan desde el departamento de comunicación del Ayuntamiento de Iznájar, el número de pernoctaciones supera ampliamente este número, llegando a registrar más de 250.000.

Para aquellos que deseen conocer más de cerca este entorno único, los alrededores del pueblo ofrecen varias rutas de senderismo que bien merecen una visita. La mejor época para recorrerlas es el otoño y el invierno, cuando el nivel del agua desciende permitiendo ver algunos de los vestigios del pasado del embalse desde la orilla.

El enigma oculto bajo las aguas de Iznájar es revelado

Descubren un misterio bajo el embalse de Iznájar: un pueblo sumergido

Recientemente, expertos en arqueología han realizado un importante hallazgo en la provincia de Córdoba, España. Durante una exploración en el embalse de Iznájar, han descubierto los restos de un pueblo sumergido.

Las evidencias indican que este pueblo data de la época romana y que quedó bajo las aguas durante la construcción del embalse en la década de 1960. En el sitio arqueológico sumergido, se han encontrado estructuras de viviendas, calles e incluso un cementerio.

El descubrimiento ha generado gran entusiasmo entre los arqueólogos y la comunidad local. Sin duda, representa una oportunidad única para ampliar el conocimiento sobre la historia y la cultura de la zona. Además, se espera que atraiga a más turistas a la región.

Un antiguo pueblo resurge del fondo del embalse de Iznájar

La sorprendente noticia de que bajo las aguas del embalse de Iznájar se encuentran los restos de un pueblo sumergido ha surgido recientemente. Los arqueólogos sostienen que este asentamiento se remonta a la época romana y que quedó cubierto cuando se construyó el pantano en la década de 1960. En el sitio arqueológico subacuático, han sido descubiertas estructuras de viviendas, calles e incluso un cementerio.

Este increíble descubrimiento ha generado una gran conmoción entre los expertos en arqueología y la población local. No cabe duda de que representa una oportunidad única para profundizar en el conocimiento de la historia y la cultura de la zona. Asimismo, se espera que atraiga a más visitantes a la región en busca de conocer este fascinante hallazgo.

Las almas errantes en las profundidades del embalse de Iznájar

Las aguas de Iznájar esconden no solo los restos de las antiguas aldeas del municipio, sino también un doloroso pasado que es necesario recordar. Al igual que en otros embalses del país, la construcción del pantano cubrió las fosas de las víctimas de la guerra civil, muchas de ellas perdidas entre los olivares.

La cifra de víctimas es difícil de precisar, ya que no todas están registradas en el acta de defunciones del registro civil. El historiador Arcángel Bedmar, dedicado a recuperar la Memoria Histórica de este pueblo andaluz, nos informa de que se estima que alrededor de 57 personas fueron asesinadas en Iznájar, según testimonios de sus familiares.

Bedmar, autor de numerosos libros y artículos , colabora además en Todos los nombres, la plataforma online que recopila información sobre las víctimas de la represión franquista. Sus esfuerzos contribuyen a mantener viva la memoria de aquellos que sufrieron en silencio.

La Irreconocible Conservación del Puente del Molinillo

Destaca especialmente el puente del Molinillo, con sus cinco arcos de medio punto que en estos días se muestran en perfecto estado sin rastro de agua bajo ellos. El entorno, ahora convertido en un extenso valle debido a la construcción de la presa, se llena de vegetación cuando la temperatura y la sequía lo permiten. Sin duda, esta es una de las estructuras más emblemáticas que quedaron sumergidas por la presa, tanto por su tamaño como por su excelente estado de conservación. Se alza firmemente recordando los días en que era un paso imprescindible para...Hoy en día, este puente vuelve a ser transitado por peatones y, precisamente, con motivo del Día Mundial del Turismo, el Centro de Interpretación del Embalse organiza varias rutas de senderismo guiado e interpretado durante este mes de septiembre. Estas rutas partirán desde la playa de Valdearenas y atravesarán la antigua pasarela de piedra, según explica Miriam Chía, coordinadora del centro y gerente de la Estación Náutica Lago de Andalucía.En la zona de la playa, donde se encuentran los hidropedales y los kayaks listos para zarpar, también es posible observar otras ruinas que llaman la atención. Sin embargo, hay que saber mirar detenidamente, ya que son difíciles de identificar. Los habitantes de Iznájar las llaman "las tumbas", pero en realidad son los restos de una necrópolis íbera donde se han encontrado ajuares con piezas de cerámica en excelente estado de conservación que se exponen en el Museo Arqueológico de Córdoba.

Explorando la orilla sur del embalse a pie

Si no tienes disponibles esas fechas y prefieres ir por tu cuenta, puedes hacerlo a través de un sendero oficial que atraviesa la zona izquierda del pantano y desde donde es posible apreciar algunas de estas ruinas. El punto de partida es el puente Agroman (en Iznájar) y se trata de una ruta lineal de 15 kilómetros que llega hasta el muro de la presa. Con un nivel de dificultad moderado, el trayecto de ida se completa en aproximadamente seis horas. Puedes encontrar todos los detalles en este enlace.

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